Ventajas de iniciarte en el Yoga

Iniciarse en el Yoga te permite mantenerte en forma al tiempo que aprendes a relajarte. Esta disciplina originaria de la India es ideal para unir mente y cuerpo. Muchas son las personas que acuden puntualmente a sus clases de yoga y disfrutan de las ventajas que ofrecen sus ejercicios.

¿Cómo iniciarse en el Yoga?

El Ashtanga es una forma suave de yoga con la que puedes llegar a quemar hasta 180 calorías por hora. 

Antes de entrar en materia conviene abordar primero las diferentes maneras de cómo iniciarse en el Yoga. Esta es una práctica milenaria, la cual consiste en una serie de ejercicios y posturas que te ayudan a mejorar tu salud. Muchos lo han convertido en su forma de vida, en toda una manera de interactuar con su realidad cercana, conocerse a sí mismos y ser más conscientes de los demás.

Iniciarte en el yoga es tan sencillo como acudir a un gimnasio o a un centro específico. Es recomendable que busques en tu ciudad si existen centros o cursos para iniciarte. Por suerte, no necesitarás de un equipo complejo y caro de conseguir. Con un chándal cómodo o la ropa que utilices para practicar deporte será suficiente, además de contar con una esterilla para realizar los ejercicios que te planteen.

No necesitas de una gran flexibilidad inicial, ya que la irás ganando con el tiempo y los ejercicios. Tampoco es un deber estar en la mejor forma física posible, al fin y al cabo, el propio yoga te permitirá ponerte en forma y bajar de peso. Además, aprenderás a meditar y a concentrarte, algo que repercutirá en cómo manejas el estrés.

Beneficios de la meditación y el yoga

¿Sabías que alrededor de 500 personas en todo el mundo practican yoga? En España, un 12% de la población lo practica habitualmente. 

Los beneficios de esta práctica no pasan desapercibidos, algo que hace que personas de todas las edades se animen a ponerse manos a la obra. Reducir el estrés, ayudarte a dormir o ganar elasticidad son algunos de los beneficios, los cuales encontrarás tratados de manera más extensa a lo largo de la entrada. Al final, acabarás dominando estas prácticas y lograrás alcanzar una plenitud casi absoluta.

1. Te ayuda a concentrarte

Si tu objetivo es aumentar tu concentración debes practicar posturas como Garudasana o postura del águila. Como se observa en la imagen, el principal reto es vencer la resistencia que sentimos al enlazar las piernas y los brazos en direcciones opuestas sin perder el equilibrio.

En el mundo moderno parece ser necesario prestar atención a casi todo lo que rodea al ser humano. Cada día hay que estar pendiente de tantas circunstancias, noticias y fuentes de entretenimiento que la concentración se resiente. Incluso hay quien piensa que las personas se concentran durante menos tiempo como consecuencia. El yoga te permitirá aumentar tu capacidad de concentración, ya que al practicar las posturas acabarás en el suelo de no hacerlo.

Más de una necesita de una gran concentración para ser consciente de dónde está cada miembro del cuerpo. Te ayuda a profundizar en esta capacidad, a abstraerte de todo lo que no sea importante para la tarea que realizas y te ayudará a prestar más atención a cada momento. Todo esto gracias a la ganas de tu cuerpo de no acabar en el suelo por un traspié.

2. Reduce el estrés

La práctica del yoga esconde también algunos secretos para descansar mejor. Cuando sabes que vas a dormir poco, es recomendable hacer la postura de vela por 5 minutos, igual que en la imagen. Según los expertos, añadirás 5 horas de sueño al total de horas dormidas.

Esta es una consecuencia de la mejora de la concentración. Al permanecer en este estado serás capaz de eliminar aquello que te aflige. Además, al lograr un estado casi de meditación, es mucho más sencillo dejar atrás todo el estrés de la vida diaria. También la práctica de los ejercicios, al igual que hacer deporte, contribuye a disminuir la cantidad de cortisol en sangre, la hormona que causa el estrés.

Asimismo, te ayudará a dormir mejor. No hay peor enemigo para el sueño que el propio estrés, por lo que el yoga te ayudará a conciliar el sueño y descansar mejor.

3. Es una fuente de autoconocimiento

El neurocientifico Richar Davidson fue el primer académico en demostrar científicamente los efectos de la meditación y el yoga en el cerebro. En concreto, demostró que estas prácticas se desarrollan en la parte frontal del cerebro, que es la vinculada a la felicidad. Por tanto, practicar esta disciplina, mejora nuestro estado de ánimo y de salud.

La introspección no solo te ayuda a reducir el estrés, sino que te permite conocerte mejor a ti mismo. Esto es algo que muchos desprecian, ya que el presente está dominado por lo superficial y lo inmediato. Sin embargo, gracias al yoga y la meditación entrarás en contacto contigo mismo con calma, sin prisas y de una manera muy profunda.

Además, la práctica del yoga ayuda al cerebro, ya que con tan solo 15 minutos al día se producen suficientes cambios químicos en él como para ayudar a las neuronas a funcionar mejor. Así, tendrás una mejor calidad de vida.

4. Desarrollo de la mente y el cuerpo

Además de lograr conciliar cuerpo y mente, el yoga tiene la capacidad de devolverte la conexión con la naturaleza. La montaña, la playa, la rivera de un río, cualquier lugar es bueno para realizar tu entrenamiento y sentirte más vivo. 

Los ejercicios que te plantea el yoga son ideales para tonificar el cuerpo y ganar una gran elasticidad y agilidad. Estas se unen a las ventajas ya mencionadas para la mente, por lo que lograrás aumentar tu calidad de vida, salud general y alcanzarás la paz interna.

Lograr una mente sana

El yoga va más allá de la práctica, es también una filosofía de vida. Si quieres descubrir más puedes consultar el Bhagavad Gita, considerado un breve resumen de las doctrinas hinduistas. Esta obra, establece las corrientes principales del Yoga y su filosofía.

Iniciarse en Yoga te permite alcanzar un buen estado de salud tanto física como mental. Gracias a los su práctica reducirás el estrés, aprenderás a concentrarte y dormirás mejor. Así, disfrutarás más del día a día. ¡Comparte esta entrada en tus redes sociales.