Cómo desconectar (poco a poco) del verano

Cómo desconectar (poco a poco) del verano

Fecha de publicación: 22/08/2019
Cómo-desconectar-del-verano-1

¿Te cuesta volver a trabajar después de tus vacaciones de verano? ¿Temes la amenaza del síndrome postvacacional? Con este post te ayudamos a plantarle cara y a ser mucho más...

Las vacaciones estivales son geniales. Tanto que a veces resultan contraproducentes. Muchos pensamos que, tras ellas, necesitaríamos otro periodo vacacional añadido para desconectar del verano. Los psicólogos se enfrentan a menudo con el síndrome posvacacional de muchos de sus pacientes. Y no siempre resulta fácil ayudarles.

Por eso, para evitar que te puedas desesperar sin saber cómo olvidar las vacaciones, queremos ofrecerte algunos buenos consejos que te ayudarán a hacerlo… despacito, como dice el hit, pero seguro.

¿De verdad es tan terrible el síndrome postvacacional?

Como las meigas en Galicia, haberlo haylo. El estrés o depresión posvacacional lo padecen muchos trabajadores al terminar sus vacaciones, cuando se enfrentan a la realidad de volver a sus empleos. Sus síntomas son parecidos a los de una depresión convencional: desánimo, insomnio, sensación de dejadez, apatía, irascibilidad, problemas relacionales, etc.

Síndrome-postvacacional-2¿Sabías que el 65% de los adultos que vuelven a la rutinaa tras un periodo de vacaciones sufren el ‘síndrome postvacacional’? Según un estudio de la Universitat Oberta de Catalunya, la causa más común es la insatisfacción con su rutina diaria.

 

¿Por qué se produce? Está claro, porque hay que volver a currar. Pero su presencia denota habitualmente un desapego o una insatisfacción hacia ese puesto de trabajo o a la existencia en general.

En realidad, todos lo experimentamos en cierto grado. Es lógico: tras tantos días libres con los horarios de sueño cambiados, las emociones renovadas y la diversión multiplicada, nos da perecilla volver al trabajo. El problema es cuando este desánimo se prolonga durante más de 2 semanas.

Volver-al-trabajo-3La Organización Mundial de la Salud (OMS) no reconoce el síndrome postvacacional como una enfermedad, sino como un «fenómeno psicoemocional» que aparece como reacción al regreso a la rutina.

 

Cómo volver al trabajo y desconectar del verano

 

Si sabes cómo hacerlo, el choque posvacacional te resultará mucho más llevadero. Y, al contrario de lo que los cenizos sospechan, la clave no está en disfrutar menos de las vacaciones. Todo lo contrario… y algún truquillo más que te será de ayuda.

 

1. Desconexión absoluta

 

Fuera de cobertura laboral. Así tienes que estar durante tus vacaciones: una desconexión al 100 %, al margen de chequeos de Whatsapps o correos, ordenadores o llamadas a la empresa. Si tu mente no rompe por completo durante una temporada, no volverás fresco: seguirás cansado y estresado. Y tu cuerpo y tu mente, que además de tuyos —y muy suyos— son muy sabios, pueden decidir romper la baraja y desatar ese temido síndrome posvacacional.

Desconectar-del-trabajo-4 ¡Ojo a tu salud mental! Hay que saber marcar los límites. Según la Encuesta Europea de Salud,  en España el 57% de la población cree que ha tenido problemas de ansiedad alguna vez en su vida, mientras que el 34% afirma haber padecido depresión.

 

2. Proceso gradual

 

¿Qué te dice el sentido común: si te has pegado dos semanas seguidas en Ibiza viviendo a cuerpo de rey, comiéndote la noche sin confundirte del todo y disfrutando de la gozadera al ritmo de la música, podrás volver al día siguiente a trabajar como si nada? Ciertamente, no. Es mejor dejar uno o dos días por lo menos de transición para llegar a casa, realizar un proceso paulatino de adaptación y empezar a acondicionar tu persona a lo que te espera. Poco a poco puedes ir retomando el ritmo cotidiano antes de enfrentarte a la gran realidad. A la larga, es muchísimo mejor.

 

Volver-a-la-rutina-5 Respetar los horarios y no llevarse trabajo a casa, regular las horas de sueño o hacer ejercicio para liberar endorfinas son algunos consejos para superar la vuelta al trabajo después de las vacaciones.

 

3. Analiza desde la distancia

 

Las vacaciones están muy bien, pero la felicidad no está hecha, solo, de satisfacciones puntuales. Así que intenta reorientar el foco de tu pensamiento. Puedes acordarte de lo bien que lo has pasado en tus vacas, pero dedica también tiempo a analizar cómo te ha ido el último año en el trabajo: qué deberías mejorar, qué te gusta, qué haces bien y qué no tanto, qué te pone de los nervios y en qué destacas. El enemigo invisible, ese que no ves, es el más peligroso. Es una buena forma de desarmarlo antes de que se presente.

Analiza-tu-vida-6 Si síntomas como la irritabilidad, el nerviosismo, la inquietud, la tristeza, el insomnio y el cansancio perduran pasadas tres semanas, tal vez sea momento de hacer balance.

 

4. Siempre positivo

 

Es mucho mejor ocuparse que preocuparse. Y, para ello, mirar en positivo es una elección personal que ayuda muchísimo. ¿Te lo has pasado bien en tus vacaciones? Fenomenal, de eso se trata. Hoy empieza el primero del resto de tus días. Y así una fecha tras otras. Seguro que en tu rutina no todo es tan malo. Fíjate en las cosas buenas: tu familia, tus amigos, tus aficiones, lo que te gusta hacer en el trabajo… Céntrate en los aspectos positivos y deja arrinconados, de momento o para siempre, todos los demás.

No pierdas de vista el lado positivo de tu vuelta. Si viajaste a algún lugar exótico durante tus vacaciones, aprovecha para cocinar algún plato local y compartirlo con tus compañeros de trabajo. 

 

5. Microvacaciones diarias

 

¿Has oído hablar alguna vez de este concepto? No me extraña, acabamos de inventárnoslo. Pero resulta muy expresivo de lo que queremos transmitirte. Las vacaciones son, en sí mismas, periodos de desconexión y cambio que alternamos con el trabajo. Dicho de otro modo, el tiempo libre es, en puridad, también vacacional. O sea, deberías empezar a disfrutarlo igual que unas vacaciones. Para ello debes llenarlo de emociones, cosas divertidas, actividades que te gustan, iniciativa, buena compañía y, sobre todo, muchas sonrisas. ¿Tienes una hora después de comer? Aprovecha esa microvacación para hacer algo estupendo.

Disfruta-de-la-vida-8 El trabajo no lo es todo, guarda tiempo para acordarte de tus amigos y familia, llámales y comparte con ellos momentos de complicidad.

 

Desconectar del verano resulta más fácil si no lo hacemos de golpe. El síndrome postvacacional es una amenaza cierta que aguarda nuestro paso. Pero, siguiendo estos consejos, seremos invulnerables a su ataque. ¿Por qué no lo publicas en tus redes? Tu gente te lo agradecerá.


1 estrella2 estrellas3 estrellas4 estrellas5 estrellas (Ninguna valoración todavía)
Cargando...