Cómo hacer calçolts

En Cataluña, hacer calçolts en la parrilla es elaborar uno de los platos más típicos de esta región, y en la carta de los restaurantes nunca faltan por su extraordinario sabor.

Cómo hacer calçots

• Ingredientes: 4 manojos de calçots (25 calçots por manojo, aproximadamente), salsa romesco (2 botes de 300 ml).
• Número de raciones: para 6 personas.
• Tiempo total: 30 minutos.
• Tiempo de preparación: 9 minutos.
• Tiempo de cocción: 21 minutos.
• Valor nutricional: 35 calorías por 100 g de calçots.
• Tipo de cocina: española.
• Tipo de plato: entrante.

Receta para elaborar calçots

Los calçots o calsots son habituales en la zona interior de Cataluña, sobre todo en las tierras del Ebro y la región del Alto Campo, y es el plato más conocido de Valls, un pueblo de Tarragona.

Se consume normalmente en invierno, y para darle el toque tradicional perfecto debes acompañarlo con una salsa romesco elaborada con frutos secos y tomates asados. Cabe mencionar que puedes hacerlos a la brasa y comerlos directamente, al no tener nada de acidez.

Pasos para llevar a cabo esta receta

A continuación te mostramos los pasos para saber cómo hacer calçots:

1. El primer paso es desatar los manojos y cortar un poco las hojas verdes para que no sean tan largas, ya que a la hora de comer se busca comodidad. Quítales la primera capa y córtales el pedúnculo para después lavarlos.

La palabra “calçot” viene de “calçar la terra”, ya que en su cultivo se amontona tierra sobre los brotes de la cebolla inicial para conseguir que esta quede delgada y espigada.

2. Coloca los calçots en una parrilla doble uno pegado al otro; la parte blanca de la cebolla tardía déjala hacia dentro y las puntas verdes hacia fuera para que al hacerlos y darles la vuelta resulte más cómodo manejarlos. Eso sí, debes tener en cuenta el tamaño de la parrilla y, dependiendo de eso, deberás hacer más tandas o no.

La temporada de los calçots empieza a finales de diciembre y termina casi llegando a la primavera. Por eso invitan tanto a hacerse al fuego.

3. Con el fuego previamente hecho en la barbacoa, coloca estos alimentos, pero es fundamental que las llamas estén totalmente vivas y no sean brasas o ascuas, si no, no quedan igual.

¿Sabías que los calçots comenzaron a prepararse porque un campesino de Tarragona quemó unas cebollas por error? En lugar de tirarlas, el campesino comenzó a pelar las capas y descubrió este maravilloso manjar.

4. Una vez que hayan pasado 5 o 7 minutos da la vuelta a todos, aunque primero comprueba que estén bien quemados. De todos modos, recuerda que no es conveniente darles muchas vueltas porque pueden salirse de la parrilla.

¿Te gustaría probar los verdaderos calçots? Todos los años a finales de enero tiene lugar la Gran Fiesta de la Calçotada en Valls. Toda ella gira en torno a este delicioso plato y cuenta con un variado programa de actos y concursos relacionados con el calçot.

5. Después de unos 15 minutos, los jugos internos de las cebollas tardías a la brasa tienen que comenzar a gotear, y eso significa que ya están bien hechas. Esto surge porque los calçots se hinchan con las llamas y eso hace que se rajen y comiencen a gotear. Un consejo que te ofrecemos es que tienes que fijarte en los grandes y medianos porque los pequeños se queman más fácilmente.

¿Sabías que con los calçots se pueden elaborar cremas, salsas, fritos con tempura u otros rebozados del mismo modo que se hace con los tallos de cebollinos o los espárragos trigueros?

6. En ese punto, abre la parrilla y sácalos de la brasa con mucho cuidado para no quemarte. Para que eso no te ocurra, cógelos por la parte verde. Después, colócalos en un papel de periódico y enróllalos.

Una vez terminado todo este proceso, pela las capas superiores para encontrar la parte blanca y sumerge el tallo en la salsa romesco. ¡Cuidado con no quemarte!

7. Para terminar con la receta de los calçots, déjalos reposar unos 30 minutos para que se terminen de hacer por completo con el propio calor residual que desprenden agrupados unos encima de otros. Un truco que puedes aplicar es ponerlos envueltos con los papeles de periódico en ladrillos para que el calor aguante mucho más.

¿Cómo servir este plato?

Lo primero de todo, sirve la salsa romesco en varios recipientes repartidos por la mesa para que todos los comensales puedan llegar a ella fácilmente, ya que muchos pueden querer mojarlos. Después colocas encima de la mesa en el propio papel de periódico o en una fuente.

Lo que se desea con este plato típico de Cataluña es quitar la capa carbonizada y descubrir la cebolla tierna y jugosa que hay dentro. Para conseguirlo, solo tienes que desenvolverlos, agarrarlos con una mano por debajo y otra por arriba y tirar hacia abajo para quitarles la piel y lograr que se queden totalmente limpios. Por último, untas la parte más blanca en la salsa de romesco, también conocida como salvitxada.

La manera más típica de comerlos es con salsa romesco. Esta se prepara con tomates y ajos asados en horno de leña, pan, almendras y avellanas tostadas, pimientos secos o ñoras, romero, aceite de oliva, sal y pimienta.

Como ya sabes, los calçots no son un plato de cuchillo y tenedor, y es muy normal ensuciarse al comerlos. Por eso debes hacerlo de forma tradicional: todos los comensales tienen que ponerse un babero, de un solo uso o reutilizables, desde el cuello hasta las rodillas.

En definitiva, hacer calçolts a la parrilla es muy sencillo y una buena oportunidad para comer uno de los platos más típicos de Cataluña y con un sabor exquisito. Eso sí, para que sea un plato 100 % catalán, lo ideal es untarlos en salsa romesco y comerlos con un babero. Ahora que ya sabes cómo hacerlos, no dudes en invitar a tus amigos. ¡Comparte esta entrada en tus redes y anima a otros a preparar este delicioso y sencillo plato tradicional!